- México recibió 77.4 millones de visitantes internacionales en 2024.
- En el sector turístico, se generó una derrama económica de 32 mil 956 millones de dólares.
Ciudad de México 29 de mayo 2025. La llegada de más de 77 millones de visitantes internacionales en 2024, junto con una derrama económica de 32,956 millones de dólares y la generación de 4.9 millones de empleos en el sector turístico, no sólo consolida a México como un destino de relevancia mundial, sino que también plantea nuevos desafíos en términos de protección, logística y confianza para quienes integran esta industria.
Así lo dio a conocer en conferencia de prensa Ynbal Adda, Gerente General de ELIM, donde destacó además que de acuerdo con el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET) y la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM), la seguridad se ha convertido en una de las principales preocupaciones para destinos turísticos, en particular aquellos que buscan atraer visitantes internacionales y albergar eventos de gran escala.
Por su parte, la Organización Mundial del Turismo advierte que la percepción de seguridad influye de manera directa en la elección de un destino, incluso por encima del precio. Esta realidad ha llevado a varios destinos del país a profesionalizar sus esquemas de protección, apostando por modelos que van más allá de la vigilancia visible.
En este contexto, ELIM, empresa mexicana especializada en Seguridad Privada Intramuros con más de cuatro décadas de experiencia, señala la necesidad de implementar esquemas de seguridad eficaces, discretos y adaptados a las características específicas de los espacios turísticos, como:
- Hoteles y resorts.
- Residencias vacacionales y complejos turísticos.
- Centros de convenciones y recintos para eventos internacionales.
- Zonas arqueológicas y destinos patrimonio.
- Infraestructura de transporte turístico. (terminales, puertos y aeropuertos).
“La seguridad no debe ser una preocupación para el viajero, sino una garantía silenciosa que le permita disfrutar plenamente su experiencia. Un entorno seguro es la base para la confianza, tranquilidad y bienestar, tanto para los turistas como para quienes les dan la bienvenida”, agregó Ynbal Adda.
Detalló que los protocolos de seguridad en entornos turísticos exigen más que presencia física por lo que se debe contemplar:
● Capacitación en atención al cliente y resolución de conflictos.
● Protocolos de actuación ante emergencias, evacuaciones o crisis.
● Coordinación con autoridades locales y cuerpos de emergencia.
● Respeto a la privacidad y normas culturales del huésped.
● Presencia visible pero no invasiva, orientada al servicio.
El factor humano sigue siendo central: personal capacitado, con condiciones laborales dignas, no sólo garantiza la protección de los visitantes, sino que aporta estabilidad operativa, confianza institucional y una imagen profesional ante operadores turísticos y organismos internacionales.
Finalmente, el Gerente General de ELIM aseguró que “garantizar un entorno seguro no es sólo una tarea operativa, sino una responsabilidad compartida entre autoridades, empresas, prestadores de servicios y comunidades. Seguridad y turismo deben avanzar de la mano para asegurar el crecimiento sostenible de México como destino global”.
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