REGENERACIÓN EN EL MEDIO TURÍSTICO DE AVENTURA:  UNA VISIÓN QUE VA MÁS ALLÁ DE LA ECOLOGÍA

Zacatlán de las Manzanas, Puebla 17 de octubre 2025. A partir de su participación en la XV edición de Atmex  Otoño 2025 Zacatán, donde el foco se centro en el turismo regenerativo a partir del detonante expuesto por Bill Reed, Presidente de Regenesis Group, mediante su ponencia “Inspirar el Cambio: Destinos Regenerativo que Empoderan Comunidades y la Relación Co-evolutiva con la Vida”, que posteriormente diseccionó en un taller, Víctor Zenteno, Chef Porpietario de Naranja Central 360, nos comparte en este artículo su visión con respecto a este interesante y revelador tema, ayudándonos a entenderlo con mayor claridad.

Por Víctor Zenteno*

Atmex, durante 15 años, ha demostrado que el interés del turismo de aventura no es, solamente, mover gente o subirlos a raizers, lanchas, cascadas, senderos, botes o avionetas. La propuesta Atmex siempre incluye una cantidad considerable de conferencias, paneles, talleres que persiguen el potencial de los actores del segmento. No pretenden educar por educar, mostrar “Hacks” o rutas cortas, claramente no está en el programa. Atmex busca mover ideas, mover el turismo de aventura hacia uno cercano con el medio ambiente, con las ciudades y comunidades que tocan los actores, con prácticas sanas, justas y de innovación.

Bill Reed.

Fue así que, en su última versión, en el Pueblo Mágico Zacatlán, Puebla, no fue sorpresa que el principal orador de la feria fuera Bill Reed. Si, ese Bill que hace muchos años ayudó a hacer un libro sobre Diseño Regenerativo que ha dado la vuelta al mundo, varias veces, y siendo arquitecto creó la certificación Leed y revolucionó al mundo con su visión de construcción basada en la historia del lugar, la cohesión social y no en la ganancia. Generando más ganancias y utilidades para los tomadores de decisiones, que lo planeado en cada proyecto que realiza.

¿Que puede decirle un arquitecto al mundo del turismo de aventura? Ese turismo que lleva años en procesos de sustentabilidad y protección ambiental. Ese turismo, que a fuerza de pérdidas y procesos ha entendido conceptos como capacidad de carga, permacultura, protección de las especies locales, etcétera… Pues, el arquitecto Bill, dijo mucho, el inicio fue polémico. “Todo lo sustentable no sirve, hay que tirarlo y comenzar de nuevo”. Vaya declaración que rompe con todo lo que hemos realizado en los últimos 20 años.

Bill Reed.

El planteamiento es un ejercicio de honestidad brutal. Definitivamente cambia el paradigma de la relación con la naturaleza y el turismo, o cualquier labor, oficio o área productiva, incluso la venta de seguros o la abogacía. Y en el fondo lo que nos dice es que dejemos de pensar en procesos para mejorar una cosa en nuestro medio ambiente, y viremos a potenciales de nuestra labor para generar esos objetivos.  Al final de la feria, se ofreció un taller facilitado por el mismo Bill a un grupo pequeño de participantes, donde se abundó en los temas y de ese encuentro les comparto las siguientes reflexiones.

El primer paradigma a cambiar es: No estamos arriba de la pirámide natural. Nosotros somos parte de la naturaleza, somos vida dentro de la naturaleza. Somos actores, no tomadores de decisiones. Por lo tanto, no somos quienes controlamos la naturaleza sino parte de un sistema complejo que incluye muchos otros sistemas más pequeños, uno de ellos, la raza humana, que convivimos en un entorno. Nosotros podemos ayudar al sistema mayor, pero no desde la perspectiva de mejora solo para los humanos. Pongamos un ejemplo de esto: Allá por los 70´s del siglo pasado, y principios de los 80´s a alguien, no se con certeza quien, se le prendió el foco y pensó que en Xochimilco no había una economía de pesca.

Al respecto señaló: “Con tanta agua y no hay peces, que desperdicio…” Se aprobó el plan y se introdujo Carpa y Tilapia en los canales, además de lirio acuático para que se viera más bonito. Con el tiempo el resultado es una economía de pesca casi nula, afectación a las especies endémicas de los canales, ajolotes el más visible, y una plaga de lirio que no permite una buena oxigenación del agua. Aquí podemos ver como una decisión tomada para el beneficio humano, puede dañar de forma permanente el entorno, los demás sistemas.

Otro paradigma a cambiar, en la visión de regeneración, es el hacer cambios buenos sólo por objetivos sin ver el potencial del lugar. Vamos a otro ejemplo. En un pequeño rancho agroecológico que cuenta con actividades de turismo, una de las cosas que piden es que en tu visita plantes un árbol. Esto tiene varias intenciones: reforestar el área, que en tu siguiente visita puedas ver como va el crecimiento del árbol; la recuperación paulatina del ambiente; la recuperación de las especies animales e insectos de la zona. Y todas estas acciones basadas en objetivos, tanto de naturaleza y del rancho son maravillosos. Pero… Resulta que nadie preguntó o platicó con la gente de la comunidad aledaña al rancho. Y están super enojados con la reforestación.

La regeneración no solo es recuperar el ambiente, es cambiar para dejar vida, y como dije antes, nosotros y los demás seres humanos somos parte de esa vida. Por lo tanto, debemos considerar a los otros y su situación, su historia como comunidad y la historia misma del lugar. Si hubieran hablado con la comunidad, se hubieran percatado que ese lugar era el paso seguro al pueblo más cercano, un paso libre sin árboles donde la sensación de seguridad era mucho mayor. Al crear un bosque esa sensación desapareció y un conflicto social apareció.

Una visión regenerativa hubiera creado relaciones de confianza con la comunidad y el rancho, generaría una visión conjunta de ese bosque dando acceso al mismo a la comunidad, para que ellos definieran el mejor sendero que les de seguridad y accesibilidad. Crearía un grupo de actores para cuidar y mejorar la vida de la comunidad, el rancho, las especies que llegan a vivir  a ese bosque y el entorno mismo. Esto es Regenerativo de verdad. Hacer que cada acción esté basada en el potencial de todos los actores, incluyendo el mismo bosque.

Trabajar desde el potencial es la clave. Dejar de pensar que el recurso financiero es el objetivo principal, si es un objetivo importante, pero no el más importante. Estos potenciales, puestos al servicio de todo el sistema es la forma de generar objetivos claros que suman a todos los actores, a toda la sociedad, a toda la naturaleza o el medio ambiente.

Así, cuando Bill Reed nos habla de dejar lo sustentable fuera y trabajar desde cero hacía la regeneración nos invita a no hacer cosas solos, a crear comunidad, a pensar en potencial de las zonas que viajamos o que llevamos turismo, a invitar y escuchar a los touroperadores, comunidades, transportistas, agentes y a nosotros mismos desde nuestra pequeña trinchera. Para que tengas como visión los potenciales y hagamos de nuestro turismo, el más empático, humano, natural, generador de vida y por lo tanto: con mayor utilidad económica.

Víctor Zenteno.

*Víctor Zenteno: Comunicólogo y Chef, entusiasta y comprometido con la gastronomía y el turismo sostenible y regenerativo, que dada su trayectoria profesional, bien podemos clasificar como experto en estos temas. Fue Director de Posibilidades del estudio de comunicación Mupcow, ha realizado estrategias en medios por más de 15 años con el Pacto Mundial de Naciones Unidas, Ecoturismo Genuino, la Universidad del Medio Ambiente y Experiencias Genuinas, entre otros. Es uno de los facilitadores en temas de gastronomía y sustentabilidad participando en ponencias y talleres con el Claustro de Sor Juana, la Universidad del Medio Ambiente, ATMEX, Ecosur, Tec de Monterrey. Fundó el Laboratorio Naranja Central 360 donde busca transformar la gastronomía actual a una sustentable y regenerativa. Ha realizado experiencias turísticas desde hace 12 años. Entre los proyectos realizados han participado con las comunidades Lancanjá y Zinacantán en Chiapas, además de crear experiencias turísticas gastronómicas en Ciudad de México, Chiapas, Puebla, Oaxaca, Estado de México, Querétaro e Hidalgo. Victor pertenece a la Alianza de Cocineros y la comunidad Economía Naranja CDMX de Slow Food.